El invierno, que llegará este viernes a las 4:27 (hora peninsular), será más cálido de lo normal en Madrid y en general en toda España después de que este otoño fuera el segundo más caluroso de la serie histórica, que comienza en 1961.
Además, el invierno podría traer más precipitaciones de lo habitual (lluvia, nieve o granizo) solo en el cuadrante noroeste de la península tras el quinto otoño más lluvioso del siglo XXI en España. Esa es la predicción estacional de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para el trimestre invernal comprendido por enero, febrero y marzo de 2024.
El portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, comentó este martes en una rueda de prensa telemática que existe una “alta probabilidad” de que el invierno sea más cálido que de costumbre “en todo el país”, con un 60% de probabilidades de que así sea en Andalucía, Murcia, Baleares y Canarias, y un 50% en el resto del país. En cambio, hay entre un 10% y un 20% de probabilidades de que la estación invernal resulte más fría de lo habitual.
“Esto es para el invierno en su conjunto. No quiere decir que no podamos tener llegadas de aire frío y nevadas en cotas bajas”, precisó Del Campo, quien subrayó que “las olas de frío van a menos” y son ahora “menos frecuentes y menos intensas que en décadas pasadas”.
En cuanto a las precipitaciones, hay más incertidumbre en la predicción porque existe un 50% de probabilidades de que el trimestre entre enero y marzo de 2024 sea más lluvioso de lo normal en el cuadrante noroeste de la península, mientras que para el resto del país no hay una conclusión clara.“Quizás el régimen de borrascas atlánticas que ha regado la fachada atlántica y la zona centro en otoño es posible que pueda volver a lo largo del trimestre invernal. Esta situación no ayuda mucho a resolver la sequía donde más lo necesitan: el sur y el nordeste”, indicó Del Campo.
OTOÑO
Por otro lado, el pasado otoño meteorológico -septiembre, octubre y noviembre de 2023- resultó ser el segundo más cálido de la serie histórica, con una temperatura media en la España peninsular de 16,3 grados, esto es, 1,9 grados más que la media entre 1991 y 2020. Solamente el de 2022 fue más caluroso, con una décima de grado más.
“Siete de los 10 otoños con mayor temperatura media se han registrado en el siglo XX”, destacó Del Campo, quien aportó como “dato muy llamativo” que el verano y el otoño de 2023, y la primavera de 2023 resultaron ser las estaciones más cálidas del registro histórico, el pasado verano resultó ser el tercer más caluroso y este otoño, el segundo.
El pasado otoño fue “extremadamente cálido” en el conjunto de España, según Del Campo, con más calor de lo habitual sobre todo en zonas del norte y el nordeste de la península, así como en Canarias. De hecho, este archipiélago tuvo su otoño más caluroso jamás registrado tras tener en octubre la ola de calor más larga de la serie.
En cuanto a las lluvias, este otoño resultó más lluvioso de lo normal en la España peninsular, donde se acumularon 243,6 litros por metro cuadrado, esto es, un 21% más de lo habitual. Se trata del quinto otoño con más precipitaciones del siglo XXI y el 17º en la serie histórica.
Hubo grandes desigualdades geográficas porque el otoño fue muy húmedo en puntos del noroeste y la zona centro gracias a un tren de borrasca atlánticas, así como en el Pirineo aragonés. En cambio, llovió menos que de costumbre en la fachada mediterránea, el sur de Andalucía y los dos archipiélagos. Este otoño fue el tercero más seco en Baleares.