Una mujer estadounidense de 21 años ha muerto tras ser agredida y empujada por un barranco por un hombre de 30 años en las inmediaciones de uno de los lugares más turísticos de Alemania, el Castillo de Neuschwanstein, en la región de Baviera.
La mujer había salido de excursión con una amiga, de 22 años, cuando se encontraron con su agresor.
El joven, que se mostraba como una persona amable, entabló conversación con las mujeres ofreciéndose a hacer una fotografía de ambas con el famoso castillo de fondo. Posteriormente las convenció para que le siguieran por un sendero oculto que conducía a un mirador.
Tras guiarlas por el sendero, el hombre agredió violentamente a la mujer de 21 años. Las investigaciones policiales indican que el hombre intentaba agredir sexualmente a la víctima, a la que posteriormente empujó por una pendiente pronunciada, haciéndola caer unos 50 metros.
A continuación, asfixió a la otra joven y la empujó por el mismo barranco después de que ella intentara ayudar a su amiga.
Según un portavoz de la Fiscalía, "su intención era asesinarlas a las dos a sangre fría".
Nadie se percató de lo sucedido hasta que, horas más tarde, algunos turistas divisaron los cuerpos de las mujeres y avisaron a los servicios de emergencias.
Las dos mujeres fueron atendidas por el servicio de rescate de montaña de Füssen y fueron trasladadas en helicótero a un hospital, donde la joven de 21 años fallecía como consecuencia de las heridas provocadas por la caída.
Según las primeras investigaciones, ninguna de las dos turistas conocían al hombre.