El último informe del Banco de España pone el foco en el futuro del sistema de pensiones. El organismo supervisor señala alta preocupación por el continuo envejecimiento de la población española, que supone más jubilados durante más tiempo y, especialmente, por la llegada de los hijos del "baby boom" de los 60 y los 70.
A día de hoy, España es séptimo país de la Unión Europea que destina mayor porcentaje del Producto Interior Bruto (PIB) a pagar pensiones públicas, dedicando un 12,7%, mientras que la media comunitaria europea está dos puntos por debajo, en un 10,4%.
El desafío se complicará en las próximas tres décadas, de cara a 2050, cuando seremos 15 millones de pensionistas y pasaremos al tercer o segundo puesto en gasto en pensiones.
La alerta del Banco de España se refuerza explicando que, incluso si alcanzásemos la tasa de empleo que tiene hoy Alemania, solo podríamos compensar el 40% del gasto extra que se prevé de las jubilaciones. De hecho, la mala situación del mercado laboral hace que los recursos destinados a pensiones superen en un 24,2%, un 24,1% y un 5,7% el volumen de fondos que Alemania, Países Bajos y Francia, respectivamente, destinan a su sistema de pensiones.