Los inspectores de Trabajo de España salen a la calle para exigir mejoras laborales "ante la sobrecarga de trabajo y las condiciones precarias". Explican que la Inspección de Trabajo actual recae sobre una plantilla "insuficiente" mientras hay 20 millones de afiliados a la Seguridad Social.
Miguel Ángel Montero, portavoz del sindicato CSIF, denuncia la falta de personal "solo hay 2.200 personas con funciones de inspección activa, harían falta como mínimo un 50% más para la población activa de España". "La sobrecarga de trabajo es descomunal y no hay forma de ascender y mejorar las condiciones desde que entras, aunque trabajes treinta años".
Declaran que su situación "empeora cada día" y anuncian protestas desde todas las provincias ante los responsables del Ministerio de Trabajo y Economía Social, y del Ministerio de Hacienda y Función Pública. "Todo apunta a que un ministerio y el otro han decidido desentenderse y apostar por una Inspección débil y ruinosa", señalan.
Los sindicatos quedaron con ambos ministerios en solucionar las reclamaciones del cuerpo en julio de 2021 y "nada se ha aplicado, ni una sola medida concretada". Expresan que se necesita "más plantilla, mejores dotaciones técnicas y materiales, así como instrumentos propios para responder al complejo panorama laboral actual".