El escritor Arturo Pérez-Reverte publica su nueva "novela de aventuras y de aprendizaje" con el título de 'Revolución'. Asegura que las "grandes palabras revolucionarias nunca" le han generado "ilusiones" y que es "escéptico" ante los movimientos revolucionarios, "aunque eso no quiere decir que no haya que hacerlos".
Pérez-Reverte ha sido entrevistado en el programa 120 Minutos de Telemadrid tras las presentación de su libro, una historia que "no se escribe en un año, las novelas se acumulan toda la vida y después van saliendo". Sobre "las revoluciones", expresa que "pierden quienes las hacen y ganan quienes se apropian de ellas".
En este caso, su protagonista, un joven ingeniero de minas español que acaba siendo testigo del ejército revolucionario del México de principios del siglo XX, es "un héroe cansado, más testigo que revolucionario" y con, "quizá", "elementos autobiográficos, en la forma de mirar y en el aprendizaje".
Aclara que la novela es "falsamente histórica": "Uso a la Historia como telón de fondo para entender el presente. Una novela actual me parece vulgar, porque el tiempo es vulgar narrativamente hablando: yo soy del siglo XX y ahí es donde me siento más cómodo, por eso mis novelas me las llevo para allá".
Con casi 71 años, Pérez-Reverte declara que vive en situación "de alerta" y no se sorprende ante acontecimientos como la invasión de Ucrania. "Vivo en saludable incertidumbre, para mí era evidente que íbamos hacia esto". Respecto a la situación "de crisis económica" y "al malestar de las familias que no llegan a final de mes y pueden enfadarse", cree que "es posible que en los tiempos que vienen haya agitación social, pero la revolución es otra cosa".