Sopa, verduras, carnes y, también, las croquetas de pringá. Hablamos de uno de los pocos restaurantes de la capital que mantiene los cuatro ingredientes en el tradicional cocido madrileño.
Además, el Restaurante La Clave, aguarda una estancia idílica e histórica, denominada el Secreto de Velázquez, lo que era antiguamente una carbonería (1895)