Esta situación de pandemia está poniendo contra las cuerdas a los taxistas que ven como su negocio se desmorona. La facturación cae en picado en un momento marcado por restricciones a la movilidad y la ausencia de turismo y ocio nocturno. Echar horas al volante no les garantiza volver a casa con más recaudación y la desesperación del gremio es mayúscula. Julio Sanz es el presidente de la Federación Profesional del Taxi y en Buenos Días hemos querido saber cuánto ha caído la facturación en el sector: "En torno a un 80% menos se ha facturado pero la situación es la que hay: ha caído el ocio, no hay turismo ni congresos y además están las restricciones de movilidad y la bajada de viajeros de avión y de tren. La situación es crítica".
Ayudas al taxi
Para el representante de los taxistas sería muy necesario para el sector ayudas por parte de las administraciones: ""Nos gustaría que las administraciones en sus campañas informativas recomendaran al taxi como medio de transporte seguro"".