En el barrio de La Ventilla hay un hostal que sigue funcionando a pesar del estado de alarma. Es un hostal que hace también de albergue para personas sin recursos. Algunas de ellas incumplen el estado de confinamiento por el coronavirus y salen a la calle a beber, fumar y a pelearse.
Los vecinos llevan ya tiempo denunciando la situación que provocan ciertas personas que acuden a este hostal, problema que se agrava más por la situación del confinamiento.
Vecinos señalan que reciben insultos por parte de algunos de los huéspedes. La Policía ha acudido en varias ocasiones respondiendo a las llamadas de denuncia y es una situación que conoce desde hace tiempo.
El Ministerio de Sanidad ordenó el pasado 20 de marzo el cierre obligatorio de hoteles, establecimientos turísticos, campings, aparcamientos de caravanas y alojamientos de corta estancia hasta, como mínimo el 26 de abril.
Este hostal permanece abierto porque atiende a personas sin recursos que no tienen otro lugar donde alojarse.