Denuncia la expulsión de su hija de 11 años de un campamento por tener discapacidad
La empresa gestora del campamento niega cualquier tipo de marginación o discriminación
Los padres de Inés, de 11 años, denuncian que su hija fue marginada y expulsada en un campamento de Salamanca, porque sus dos compañeras se quejaron de que compartían habitación con una discapacitada.
Las compañeras de habitación se quejaron a sus padres, quienes llamaron a la organización. La solución del campamento: que la menor madrileña durmiese sola en una habitación. Ella no quiso y ahora sus padres estudian denunciar al campamento por discriminación. Los padres ya advirtieron al campamento que su hija sufría un pequeño retraso madurativo. La niña, de momento, se ha ido a pasar el verano con sus abuelos a Barcelona.
En declaraciones al programa Buenos Días Madrid, Carol, la madre de Inés, describe el estado de ánimo de la pequeña: "Ahora está contenta, pero en el viaje lloró".
"Inés llegó al campamento al mediodía el viernes, por la noche me llamó la coordinadora para decirme que unas madres se habían quejado, las que compartían habitación con Inés y que Inés tenía que salir de la habitación porque no querían compartir habitación con ella", relata.
Según esta madre la niña fue invitada a dormir en una habitación con una monitora, pero esta se negó porque quería seguir durmiendo con sus compañeras. A la una de la madrugada la coordinadora informó a la madre que la niña no había querido salir de la habitación y la emplazó para una conversación al día siguiente. En una posterior conversación, la madre sostiene que le informan de que la coordinadora y el responsable del campamento han decidido que Inés no continúe en el mismo. La razón argumentada es que las dos niñas no querían dormir con Inés.
El campamento niega cualquier tipo de discriminación
La madre sostiene en todo momento que informó al campamento de que Inés tenía una pequeña discapacidad, pero les pidió que no lo contasen al resto de niños para que no la etiquetaran. También insiste en que Inés no necesita cuidados especiales, pues es una niña autónoma e independiente.
La versión del campamento es completamente opuesta. Niegan cualquier tipo de marginación o discriminación. Sostienen que hay más niños con necesidades especiales en el campamento y que han recibido felicitaciones de los padres.