El Paseo de la Castellana ha amanecido tomado por miles de taxistas que desde ayer protestan ante la sede de Fomento para luchar por sus derechos y por su profesión.
Solo se puede circular en sentido lateral, el resto de carriles están ocupados por miles de vehículos blancos que han decidido pasar la noche en una de las arterias principales de la capital, en señal de unidad y de presión hacia el Ministerio.
En Buenos días Madrid nos hemos acercado hasta la Castellana para saber cómo han pasado la noche los taxistas. Algunos han dormido en tiendas de campaña y otros en sus propios coches.
Aseguran que ha sido una noche larga, en la que han dormido pocas horas, han hablado entre ellos y sobre todo, se han animado los unos a los otros para seguir adelante y no dar un paso atrás.