Casi una veintena de familias que viven en la calle María Guerrero, muy cerca del antiguo Vicente Calderón, firmaron sus contratos de arrendamiento con una inmobiliaria que se ha declarado en concurso de acreedores y los inmuebles han sido adquiridos por la Sareb, el conocido como "banco malo".
Ahora, esas 18 familias tienen hasta el 6 de febrero como fecha límite para abandonar sus casas, ya que han intentado negociar sin éxito con el banco. Desahucio inminente que tratan de evitar, como han contado a Telemadrid.
En los tres inmuebles afectados se encuentran familias con niños, personas dependientes, enfermas, ancianas...
Reclaman poder seguir pagando un alquiler acorde con sus ingresos y una solución por parte de la administración.
Aumento de los precios de la zona
Los vecinos estás seguros que esta situación se ha producido por el aumento del precio de la vivienda de la zona, ya que la 'operación Mahou' y el derribo del Vicente Calderón está encareciendo el precio de todas las viviendas.