Estamos acostumbrados a que la luz recaiga sobre Erling Haaland, pero como el delantero noruego últimamente no brilla, el foco está en Phil Foden.
Tres oportunos goles de Foden, el primero al borde del descanso al que llegó con ventaja su equipo, otro a la hora de juego, cuando el Aston Villa amenazaba con otro empate; y uno más después, la sentencia, llevaron al triunfo al Manchester City, otra vez vencedor en un duelo de la Premier después de dos empates seguidos.