No es que la Torre Eiffel vaya a sustituir a la Cibeles o que los jugadores del Real Madrid cambien su dieta por queso y croisanes. Tampoco que vayan a llegar puntuales a entrenar o que en vez de agua se bañen en champán.
Lo que esta temporada no ha podido hacer Zinedine Zidane, podría cambiar la próxima campaña. Zizou es francés y a partir de ahora el idioma galo lo va a entender la mitad de la plantilla.
Un Real Madrid a la francesa, con jugadores que, además, sienten admiración por el técnico de Marsella porque le entienden. Benzema, Varane, Courtois, Hazard y Mendy juntos en el club del Bernabéu.
Zidane va a hacer lo que quiere: "Soy entrenador y siempre voy a hacer lo que yo quiero". Y casi todo lo que quiere habla francés.