Karina habla a Anne Igartiburu sobre sus experiencias en la industria musical, y cómo ésta la expulso en su mejor momento
Foto: REDACCIÓN |Vídeo: Telemadrid
Con su dulce voz y su carisma en el escenario, Karina ha logrado cautivar al público español e internacional. Nacida en Jaén en 1943, comenzó su carrera musical a principios de los años 60 y rápidamente se convirtió en una de las estrellas más destacadas de la música española. Representó a España en el Festival de Eurovisión en 1971 con ‘En un mundo nuevo’, alcanzando el segundo lugar.
A lo largo de su carrera, ha explorado una variedad de estilos musicales, desde el pop y la balada hasta el rock y la música disco, y ha grabado éxitos inolvidables como ‘Las flechas del amor’ y ‘El baúl de los recuerdos’. En esta entrevista de Diez Momentos con Anne Igartiburu, ha hablado sobre sus experiencias en la industria musical, y cómo ésta la expulso en su mejor momento.
10. El baúl de los recuerdos
La gran pantalla del programa recibe a Karina con imágenes de Osaka Show (1970), un trabajo que tuvo a Valerio Lázaro de realizador en Japón. “Me evoca un viaje a Japón que duró 36 horas, con dos escalas. Fue un programa para TVE en la Expo 70’ con Julio Iglesias, Masiel, Miguel Ríos, 12 días en distintos stands, con aquellos medios que eran muy pocos: dos cámaras”.
Anne le pregunta por su pasado: “¿Te gusta mirar atrás?”, a lo que Karina, reflexiva, responde: “Me gusta tener buena memoria, ha habido momentos en mi vida que he sido nostálgica. Ahora no me gusta la nostalgia, no quiero olvidar nada”.
9. La familia Llaudés
Una fotografía familiar muestra a una Karina arropada por sus padres y hermanos. “Solo quedamos Paco y yo, y ya somos mayores. En casa se oía la voz de mi madre que tenía una voz privilegiada”. Su familia trabajaba en una industria familiar que curtía la piel, hasta que tuvieron que marcharse a Madrid.
“Cumplí los 13 años en Madrid, fue un choque. Entonces me dijo mi madre: ‘Mari, tenemos que trabajar’. Me puse a trabajar en grandes almacenes, Saldos Arias, de dependienta en la sección de niños”. El trabajo la obligó a abandonar la escuela, así que le pidió a su madre: “Yo voy a trabajar, pero como no voy al colegio, ¿puedo ir a una academia y al conservatorio?”.
Anne le regala un recuerdo reproduciendo la Cadena Ser de 1959: Discomanía, con Raúl Matas. En la época de los discos dedicados, su hermano “apañaba” los cables para oír una radio pirata que reproducía artistas como Cliff Richard, Johnny Barber, Polanca. “Decía: ‘esta sí es nuestra música’. Con las canciones de mi padre y madre no nos identificábamos”.
8. El bikini amarillo
Con una foto de ella de joven, ambas cantan la música al compás la primera grabación de Karina. Para sus primeros concursos y grabaciones no contaba con teléfono propio, por lo que cuenta que enfrente de casa había una tienda de ultramarinos, y les daba a los concursos ese teléfono.
Por aquel entonces, su padre no valoraba que Karina le pusiese tanto empeño en la música. “Él tenía los pies en la tierra, y mi madre compartía conmigo esos sueños”. Karina le confiesa a Anne cómo ha afrontado sus peores momentos: “Creo que nunca he dicho esto, cuando todo se vino abajo, como un castillo de naipes, se perdió la casa de Jaén, le hablaba a Jesús y le pedía: ‘Me quiero echar a mi espalda el peso de sacar a mi familia adelante, no me lo quites. Y quiero llevarlo con alegría e ilusión’”.
7. Romeo y Julieta
El programa Ganas de Sábado (1968) muestra a Karina en uno de sus mejores momentos, con una fuerte escenografía: “Es fundamental tener un sello discográfico que apueste por ti”. Sobre su nombre, cuenta que no lo eligió ella ni la discográfica, fue Torres Bruno quien comenzó a llamarla Karina, que en italiano significa bonita, simpática, dulce.
A pesar de que cobrara 100.000 pesetas al mes, y que su hermano la ayudaba a gestionarlo, su padre seguía sin aprobar su carrera profesional: “No me vio actuar hasta el festival de Eurovisión, no quería que fuera cantante por nada del mundo”.
6. Pasaporte a Dublín
En un videoclip de autopresentación, Karina se mostraba al público europeo para participar en Eurovisión. “Uno de los momentos más bonitos, aprendí mucho, con Rocío Jurado, Mino Bravo, Junior”, comenta viéndose a ella con 23 años en imágenes. En ese momento, su discográfica no quería que participase en más concursos, justo cuando grababan El baúl de los recuerdos.
5. Eurovisión (1971)
La cantante ha recordado en Diez Momentos su participación en Eurovisión, con la que se ganó el público internacional, pero también la aprobación de su padre, que le esperaba en el aeropuerto de vuelta.
Cumpliendo los 30 años y en pleno borágine musical, Karina fue expulsada de su discográfica, uno de los momentos más duros de la cantante que estuvo a punto de abandonar los escenarios para siempre.
En Galas de sábado (1968), un año antes de que cerrara su ciclo con la discográfica, se ve a una Karina con mucha presencia en los escenarios. A Anne le sorprende que la cantante de canciones tan románticas le contara que nunca se ha enamorado. Confiesa uno de sus grandes deseos, que la llamen por teléfono y le digan: “Te vamos a grabar lo que tú quieres para cerrar tu ciclo”.
Anne tira del hilo para que Karina sueñe en esta entrevista, así que le pregunta por cómo haría ese disco. “Diez canciones, un par de baladas, pero no más”. Y confiesa con quién le gustaría hacer un dúo: “Pues me gustaría mucho hacer un dúo con Alejandro Sanz, pero no querrán, está muy alto. No podrá ser. Si yo en el fondo estoy muy pequeñita”, cuenta Karina sin poder contener las lágrimas.
2. La maternidad
1. Ponte la mascarilla
Durante el confinamiento, Karina descubrió que Instagram podía ser una herramienta estupenda para resurgir, especialmente con el público joven. Después de recorrer algunos de sus mejores momentos en la red social, Anne la prepara para su regalo final. Las luces se apagan y entra la cantante Julia Rubio a versionar su canción de Eurovisión con la que ambas se emocionan.