Los ciberdelitos han aumentado casi un 23% en el último año y alrededor del 90% de los casos son estafas. ¿La última moda? La suplantación de identidad del correo electrónico.
"Consiguen abrir cuentas bancarias a nombre de esas otras personas en los que le han robado los datos y así poder mover su dinero sin dejarle ellos rastro" explica Iván Outomuro, de la Policía Nacional de la Unidad Central de ciberdelincuencia
Los estafadores se quedan directamente con la transferencia de la nómina: tan solo tienen que hackear el correo del trabajador.
Una vez lo consiguen mandan un mail a la empresa para la que trabaja la víctima suplantando su identidad notificando que ha cambiado la cuenta e indican una nueva donde tienen que ingresar la transferencia. De esta forma, la nómina va directamente a los bolsillos de los estafadores.
Otro tipo es la que ha destapado la policía esta semana en Madrid. Una banda liderada llegó a suplantar la identidad de más de 200 personas para apostar en plataformas de Internet.
Aunque una de las estafas comunes es la de la suplantación de las entidades bancarias," me habla una persona diciéndome que es personal de equipo de seguridad de ING y que probablemente alguien está intentando entrar a todas mis cuentas".
Otras técnicas son mucho más sencillas pero igualmente eficaces, por ejemplo, la del hijo que pide por SMS dinero a sus padres porque dice estar en apuros. En el último mes la policía ha llegado a esclarecer 95 denuncias relacionadas con este modus operandi.
¿Las recomendaciones para evitar caer en estas estafas? Una muy concisa: "no dar datos a nadie que no conozca"