Estamos en El Boalo, a los pies de la Sierra Guadarrama y conocemos el pueblo con Alfredo Expósito que nos explica que " la arquitectura tradicional de nuestro pueblo es la piedra de roqueña".
La iglesia de San Sebastián Mártir se construyó en 1620, justo después de una gran epidemia de peste que se produjo en 1599, en gratitud al santo, que según la tradición cristiana salvó al pueblo de la enfermedad. "Es donde han pasado las cosas más importantes de todos los boaleños".
Nuestra segunda parada es la escuela donde han estudiado los niños de la localidad desde los años 50 hasta ahora. Como curiosidad, el edificio aparecía en la película de José Luis Ozores, 'El aprendiz de malo'.
Cuando Carmen Martín Gaite abandonaba la lectura podía ver La Maliciosa, pico que se erige sobre la localidad. "Ella venía aquí a pasar a largos periodos de descanso, después de sus múltiples viajes y sí que era una persona muy cercana con amigas de aquí".
En la casa familiar de El Boalo se creó un Centro de Estudios de la autora, donde reposan sus restos y donde está la biblioteca, el archivo y los muebles y objetos que Carmen Martín Gaite tenía en Madrid.
Por último, nuestros pasos nos dirigen hacia la ermita de San Isidro construida por todos los vecinos "piedra sobre piedra, día a día, con su esfuerzo".