Los ajos de Chinchón, de diente pequeño y cabeza prieta, están considerados como unos de los mejores del mundo pero, ¿en qué se diferencian del que podemos comprar en el supermercado?
‘Dos en la carretera’ ha charlado con Santiago, uno de los pocos agricultores que aún cultiva esta variedad autóctona de Chinchón. "Lo que más salta a la vista es que son más pequeños que los comunes. El sabor es más intenso y refinado, y cuestan más trabajo criarlos que los otros", ha explicado.