Un tanto de Braithwaite premió el orgullo de un Leganés al que despidió en pie y con ovación su afición tras el primer triunfo de su historia en Butarque ante el Real Madrid, que jugó sin tensión competitiva y con la ventaja de tres goles de la ida de los octavos de final de Copa del Rey en su cabeza.
Un Real Madrid apático, sin la tensión necesaria que demanda un encuentro en la élite, condicionado por la clara ventaja conseguida en el Santiago Bernabéu, asomó en una noche gélida sobre Butarque, donde sólo el ímpetu de un Leganés luchador puso algo de emoción.
Isco, titular
Isco era el centro de todas las miradas. Tercera titularidad con Solari, siempre en partidos de poca historia, y una nueva oportunidad perdida para rebelarse ante lo que considera una injusticia y escapar del papel secundario al que ha quedado relegado. Lejos de su mejor forma física, la noche no ayudó.
Y eso que Solari retocaba su sistema para ubicar en la situación ideal a Isco. El Real Madrid pasaba a un 1-4-2-3-1 con libertad de movimiento para el andaluz a espaldas de Vinicius, el improvisado nueve ante la plaga de lesiones.
Ficha técnica:
Leganés: Cuéllar; Juanfran, Bustinza (En-Nesyri, m.70), Omeruo, Siovas, Kravets (Jonathan Silva, m.75); Recio, Gumbau (Arnáiz, m.63), Eraso; Sabin Merino y Braithwaite
Real Madrid: Keylor Navas; Odriozola, Varane, Nacho, Reguilón (Ceballos, m.46); Casemiro, Valverde; Lucas Vázquez (Brahim, m.85), Isco (Cristo, m.68), Marcelo; y Vinicius
Gole: 1-0, m.30: Braithwaite
Árbitro: Hernández Hernández (Comité Las Palmas). Amonestó a Recio (73) por el Leganés; y a Vinicius (82) y Casemiro (90) por el Real Madrid. Expulsó al técnico Mauricio Pellegrino por sus protestas a los 85 minutos
Incidencias: encuentro de vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio de Butarque ante 9.437 espectadores