El actual Casino Gran Vía es el lugar donde se reunía la flor y nata de la sociedad madrileña del siglo XX. Aquí estuvo el último lugar de reunión del Bilis Club, un club con nombre de reflujo gástrico que era la tertulia literaria que reunía a escritores como Clarín, protagonista de nuestra historia. Un escritor llamado Emilio Boadilla empezó a cosechar elogios. Clarín le retó a un duelo con la frase “Batirse en duelo con Fray Candíl va a ser coser y cantar”.
El duelo duró poco. Boadilla le pegó un tajo en el brazo. Clarín sangraba tanto que pararon el combate para coserle allí mismo. Boadilla lo miró con esa chulería que te da ganar un duelo ¡y se puso a cantar!Cuando los padrinos le dijeron que eso era una falta de respeto, Emilio Boadilla contestó: “El pronóstico de Clarín se ha cumplido, a él lo están cosiendo,
