El año pasado, la edad media de la maternidad en España superó los 32 años, según el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE). Los datos del CSIC, un 30,3% de las mujeres tuvo su primer hijo a los 35 años o más y un 6,6% con más de 40.
Las circunstancias socioeconómicas como la crisis, el aumento del paro, los trabajos precarios y la conciliación laboral son algunas de las causas de este cambio.
Por estos motivos, cada vez son más las mujeres que optan por la congelación de sus óvulos para preservar su fertilidad y poder ser madres en un futuro. Una técnica que permite parar el reloj biológico.
Además, un equipo de médicos de Birmingham, Reino Unido ha desarrollado una técnica de preservación de una parte de tejido ovárico cuando aún se es joven para implantarlo años después y retrasar la menopausia hasta 20 años a partir de hormonas propias y evitar las complicaciones de los tratamientos hormonales.
Nos lo aclara Jackie Calleja, Ginecólogo y Director de la clínica Bmum.