Llega la navidad, las cenas de empresa y los tan temidos para algunos controles de alcohol y drogas en la carretera. Los agentes velan por nuestra seguridad, pero algunos se lo ponen difícil.
La DGT lucha contra los grupos de mensajería instantánea y aplicaciones que avisan en cuestión de minutos de dónde se colocan estos controles para que el resto de usuarios los pueda evitar. La Guardia Civil de tráfico ha pasado de vigilar a ser vigilada, dicen que pillar a alguien de entre 18 y 25 años en un control es casi milagroso. Los jóvenes entre 24 y 35 años son el grupo de edad que menos denuncias reciben, pero sorprendentemente en el que se contabilizan más muertes.
Terminar con estos intercambios de información es lo más importante para nuestra seguridad. Podemos estar alertando a alguien que no vaya en buen estado para conducir y que personas inocentes terminen pagándolo. Mientras tanto desde Tráfico en esta lucha se han creado controles exprés, de 15 minutos o dinámicos, que están en movimiento. Y que impiden alertar a quienes nunca deberían haber cogido el coche.