Jesús y Nieves son los nuevos dueños de la librería Pérez Galdós, que fue fundada en 1942 por uno de los nietos del escritor.
Lo que hace de esta librería un lugar único es que aquí se pueden encontrar muchos libros olvidados, antiguos y que no se encuentran en muchos sitios.
De hecho, a la Pérez Galdón le llaman tambiñen el “santuario de los libros desaparecidos”. Su almacen está lleno de joyas de papel esperando las manos de los aficionados al tacto del papel y a la mejor literatura.