Pablo Escobar, el conocido narcotraficante, criminal, terrorista y político colombiano, fundador y máximo líder del Cártel de Medellín, ingresó el 'La Catedral' el 19 de junio de 1991.
La Catedral, era una prisión ubicada en Envigado, Antioquia, Colombia, y fue construida por el propio Escobar entre montañas, con vista directa sobre Medellín.
Tenía cancha de baloncesto, helipuerto y todo tipo de lujos y comodidades para la estancia del peligroso narcotraficante, una estancia que él mismo pactó a cambio de prohibir la extradición de colombianos en la Asamblea Constituyente.
Todo iba bien hasta que Escobar conoció la intención de trasladarlo a una prisión que entonces era una base militar, por lo que decidió escaparse del recinto, y así lo hizo.
Ahora la antigua prisión es un atractivo turístico sin igual, aunque está completamente en ruina ya que fueron muchas las personas que acudieron a saquearla al conocerse cómo eran las instalaciones y al rumorearse que Escobar había enterrado aquí canicas de plástico con dinero.