Muchos españoles se encuentran pendientes del Mundial de Rusia. Esta semana Luis Vega, nuestro reportero, ha recorrido diversas partes de Madrid para saber cómo afecta el evento deportivo del año a nuestro día a día.
Nuestro reportero se prepara para la ocasión en uno de los bazares más veteranos de Madrid: por apenas diez euros conseguirá el kit básico con mochila, gafas, pintura y hasta la ya imprescindible vuvuzela. Y de aquí a Villaviciosa de Odón, municipio en el que su alcalde ha instalado una pantalla gigante en la plaza del Ayuntamiento para que todos los vecinos puedan animar desde allí a la selección española.
‘Mi cámara y yo’ también se ha desplazado al Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas para despedir a algunos de los primeros aficionados que viajan a Rusia para animar a nuestra selección. Desde auténticos forofos dispuestos a pagar 3.000 euros por pasar un fin de semana futbolero, a los afortunados que han ganado el vuelo y la entrada al estadio en un sorteo.
Tal es el fervor de la afición por ver como nunca estos partidos, que las tiendas de electrodomésticos han tenido que aumentar su oferta de televisores de gran tamaño. En uno de los grandes almacenes más conocidos de la capital, los descuentos alcanzan hasta el 40% y aseguran que incluso las pantallas de más de 6.000 euros, vuelan.
Además, el embajador de Rusia, Yuri P. Korchagin, recalca la importancia de este evento para su país. Esperan la llegada de tantos aficionados que se han tenido que preparar a conciencia, y para reforzar las medidas de seguridad, todo el que compre una entrada para uno de los doce estadios del Mundial , obtiene “el pasaporte del aficionado”, una especie de visado con el que además podrán usar gratuitamente el transporte público.