Tejer y teñir telas igual que lo hacían los monjes de los monasterios cistercienses en el S. XIII
REDACCIÓN
En la cara Norte de la Sierra de Guadarrama, una pequeña empresa familiar madrileña ha encontrado un nicho de mercado en tejer y teñir telas igual que lo hacían los monjes de los monasterios cistercienses en el S. XIII. Han convertido las ruinas de un monasterio en un taller textil artesanal donde confeccionan piezas a la vieja usanza, con telar y lanzadera.
Camila y su madre, están al frente de esta empresa y se han empeñado en demostrar que el "hecho a mano" en pleno S.XXI sigue muy vivo.
Estas piezas están tejidas en la abadía cisterciense de Santa María de la Sierra. Cada pieza está tejida una a una, lentamente y cuidando hasta el último detalle por tejedores locales.
Han creado un jardín de plantas tintóreas donde cultivan 160 especies con el fin de dar a conocer su uso.
En este lugar, también se llevan a cabo seminarios, cursos y conferencias en torno al textil, la moda, y el color.
El origen de este proyecto está en la Abadía de Santa María de la Sierra situada en la linde de un robledal y un pinar en la vertiente segoviana de la Sierra de Guadarrama. Este monasterio cisterciense fue construido entre 1220 y 1270. Desamortizado en 1836, es desde 1931 Monumento Nacional (hoy BIC). Anexionado al monasterio se encuentra el taller textil y un espacio para albergar los cursos y conferencias.