Se cumplen 25 años de la detención de Emilio Muñoz, un transportista de 38 años; de su mujer, Felisa García, de 35 años; y de Cándido Ortiz, fontanero de 35 años.
El primero, cerebro del secuestro de Anabel Segura, quedó en libertad hace unos años por la derogación de la doctrina Parot. Su mujer cumplió un año de prisión y Ortiz falleció en la cárcel hace 11 años.
Los tres participaron en el secuestro y muerte de la joven de 22 años en abril de 1993. Dos años más tarde los investigadores de la Policía consiguieron detener a los criminales.
El análisis de las voces, grabadas en las conversaciones que mantuvieron con los padres de Anabel Segura, resultó crucial para localizarlos y detenerlos.