Carlos padece una enfermedad degenerativa que afecta a su corazón y no puede tratarse. El medicamento, que cuesta 9.000 euros al mes, no lo financia la sanidad pública.
Como él, otros pacientes con amiloidosis, ven cómo se acorta su esperanza de vida por una cuestión económica.
A Carlos el diagnóstico le llegó el pasado agosto, amiloidosis cardiaca, una enfermedad rara, degenerativa y sin cura pero sí con un fármaco que frena su avance, el Tafamadis.
Jose Manuel también padece esta patología y preside la asociación que lleva su nombre. Él tuvo la suerte de entrar en un ensayo clínico con este medicamento del que ahora depende su vida.
El doctor Pablo García Pavía, cardiólogo en el Hospital Puerta de Hierro, centro de referencia en España de esta enfermedad, confirma la indicación de este fármaco para tratar casos de amiloidosis.
El Tafamadis, según él, está aprobado en todos los países europeos excepto en Dinamarca y España.
Según Sanidad, la financiación de este fármaco estaría ya sobre la mesa, falta la aprobación definitiva y el tiempo corre en en contra de los pacientes.