En la plaza de la Venta del Batán se ha celebrado certamen, el primero en invierno, para conocer al mejor alumno de los 250 que asisten a las seis escuelas taurinas de Madrid. Curro Nuñez de la Escuela de Valdemorillo, ha sido el ganador.
Hoy son becerros, no hay sangre, las banderillas no tiene puntas, no hay picador y entrar a matar se queda en gesto. Lo que si hay es competencia, ganas y afición.
La plaza llena y el público animado. Entre los jóvenes un deseo: Llegar a "figura" de la tauromaquia.