El Papa ha clamado por todas las personas extenuadas "por la guerra, por el hambre y por toda forma de opresión" y ha pedido que el don de la paz del Señor resucitado llegue a todos los rincones del mundo.
En un llamamiento tras el rezo del ángelus del Lunes de Pascua asomado a la plaza de San Pedro desde la ventana del palacio apostólico, Francisco ha pedido a Dios el don de la paz para "las personas extenuadas por la guerra, por el hambre, por toda forma de opresión".
Así, ha agradecido todos los mensajes de cercanía y oraciones que le han llegado en esta Semana Santa y ha pedido "que el don de la paz del Señor resucitado" llegue a todos y especialmente, ha precisado, "donde más se necesita, a las personas extenuadas por la guerra, por el hambre, por toda forma de opresión".
Con este rezo del ángelus, el Papa ha concluido las grandes citas litúrgicas esta Semana Santa, si bien tuvo que anular su presencia en el Vía Crucis del Coliseo del Viernes Santo para "preservar su salud", tal y como indicó el Vaticano.