Cuatro aviones Eurofighter del Ala 14 del Ejército del Aire han despegado este viernes de la Base Aérea de Albacete para sumarse a las misiones de disuasión de la OTAN en su flanco este desde la base de Graf Ignatievo, en Bulgaria.
Este despliegue se produce en medio de la crisis con Rusia, aunque se enmarca como parte de las misiones habituales de la Alianza Atlántica de vigilancia de su espacio aéreo en las que España participa desde hace casi una década.
Se trata de un contingente formado por un total de 130 militares. Parte de ellos viajaron a Bulgaria hace ya días para preparar los requerimientos logísticos y los cuatro Eurofighter que han llegado este viernes completan el despligue, bajo el nombre de Destacamento Aerotáctico Strela.
Dada la polémica suscitada por la participación española en la crisis de Ucrania, el Ministerio de Defensa subraya que despliegue se enmarca dentro de las actividades habituales de las Fuerzas Armadas "en cumplimiento de los compromisos internacionales de España, en beneficio de la disuasión y de la defensa de los países de la OTAN".
Los cuatro aviones que permanecerán en Bulgaria hasta el 31 de marzo se dirigirán después a Lituania --donde se les sumarán otros dos--, para iniciar allí una nueva misión de Policía Aérea del Báltico.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, subrayó este jueves que los cazas españoles no asumirán misiones ofensivas en Bulgaria, sino que su responsabilidad es la vigilancia y patrullaje del espacio aéreo en una labor de disuasión.
Los cazas españoles participan en la estrategia de la OTAN para garantizar la seguridad de sus países miembros del Flanco Oriental y dentro del Sistema Integrado de Defensa Aérea y Anti-Misiles de la OTAN.
La llegada de los aviones españoles coincide con el despliegue del primer contingente de soldados estadounidenses en la vecina Rumanía, donde estarán estacionados en la base aérea Mihail Kogalniceanu, también ante el trasfondo de la crisis de Ucrania.