El nuevo Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, se ha comprometido este jueves a trabajar "con dignidad y ecuanimidad, con rigor, con eficacia y con independencia" en defensa de los derechos de los ciudadanos y para que sus condiciones de vida sean mejores y tengan "oportunidad y posibilidades".
Durante la toma de posesión de su cargo, celebrada en el Salón de Pasos Perdidos del Palacio del Congreso, Gabilondo ha prometido su nueva responsabilidad "con realismo y con humildad" y ha reivindicado su compromiso "de modo singular" con quienes están en una situación penosa, son víctimas de la desigualdad y de la injusticia y de la violencia.
"Las épocas acostumbran a ser complejas y la nuestra no defrauda al respecto", ha admitido el exministro de Educación y exportavoz socialista en la Asamblea de Madrid, que ha reconocido la "extraordinaria e ingente" tarea que tiene por delante la institución. "Para obrar con ponderación y coherencia esta tarea ha de ser conjunta", ha añadido.
Gabilondo ha agradecido el trabajo a sus antecesores -al acto han asistido Soledad Becerril (defensora de 2012 a 2017) y el hasta ahora defensor en funciones, Francisco Fernández Marugán- y ha remarcado que su trabajo consiste en hacer la defensa de los derechos humanos "la absoluta prioridad".
"Agradezco esta designación con la firme determinación de trabajar por la convivencia en nuestra sociedad y porque las condiciones de vida de los ciudadanos y de las ciudadanas sean mejores y encuentren cauces de oportunidad y posibilidades", ha concluido.
Por su parte, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha considerado que los cuatro años de retraso que han tardado en conseguir el acuerdo de las Cortes para designar un nuevo defensor del pueblo "encuentra su compensación en la persona Ángel Gabilondo".
De él ha destacado, además de su faceta de intelectual y su capacidad de escucha, reflexión o diálogo, su dedicación a la política: "Una condición que no sólo no lo invalida para el cargo de defensor sino que constituye buena parte de sus méritos para ello", ha aseverado.
"Porque Ángel Gabilondo ha sido, en cualquiera de sus responsabilidades, un político del diálogo y del acuerdo, del razonamiento y los proyectos comunes, del alejamiento de las dinámicas de enfrentamiento y polarización que son el riesgo más actual y más peligroso para nuestra democracia", ha destacado.
Para Batet, el nuevo defensor es la mejor muestra de lo que necesita la política española y sus instituciones: "la aportación y la implicación, el compromiso personal de entrega y servicio", y le ha transmitido la esperanza que significa su nombramiento para la sociedad.
Al acto han asistido el presidente del Senado, Ander Gil, y los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares; Justicia, Pilar Llop; Defensa, Margarita Robles; Interior, Fernando Grande-Marlaska; Presidencia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños; Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y Derechos Sociales, Ione Belarra.
También han estado presentes las que serán las adjuntas primera y segunda del Defensor del Pueblo, María Teresa Jiménez Becerril y Patricia Bárcena García, respectivamente, así como amigos y familiares de Gabilondo. EFE