Manuel Morocho, inspector jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía y principal investigador de Gürtel, ha dicho ante el juez que sus superiores le pedían cerrar cuanto antes los informes sobre la Caja B del Partido Popular.
Es su segundo día de declaraciones y el inspector ha insistido en que el ministro Fernández Díaz ordenó a sus superiores que terminaran cuanto antes la investigación.
También ha revelado que el juez Ruz se sintió espiado durante la 'operación Kitchen' y que por ello se reunían fuera de los despachos.
El pasado martes, durante las tres horas de su declaración, el inspector narró cómo su superior, Olivera, le exigió que quitara de sus informes nombres de políticos, entre ellos el de Rajoy: "se me conminó a que no pusiera en el cuerpo del informe ningún nombre de responsables políticos. Concretamente se me expresó el nombre de Mariano Rajoy".
Manuel Morocho ha declarado que también debía quitar los nombres de Ana Mato o Lopez del Hierro, el marido de Cospedal: "me dijeron que el error es que he puesto a López del hierro".
Morocho sitúa a la cúpula de la policía y a Interior detrás de las presiones y da nombres: el de Eugenio Pino, a quien acusa de sobrecargarle de trabajo para frenar el 'caso Gurtel', y el de García Castaño de quien ha afirmado que se dirigió a él diciendo "tú que haces aquí si tenías que estar muerto".
El inspector ha declarado, además, que intentaron 'comprarle' con destinos golosos, como Lisboa: "el puesto era para mí, seis mil euros al mes, donde quieras irte"
"Me deja usted un panorama desolador"
El testimonio del inspector ha dejado perplejo al propio magistrado Manuel García-Castellón: "me deja usted un panorama desolador", ha dicho el juez, a lo que el inspector ha contestado que "se lo puedo dejar peor todavía". "siga siga… le agradezco honestidad", ha sido la respuesta del juez.,
La fiscalía cree que 'la Kitchen' tuvo éxito y que algunos de los mandos policiales implicados tienen material incautado a Bárcenas cuyo contenido podría involucrar penalmente a dirigentes del Partido Popular.