La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) señaló este jueves que la tasa de referencia establecido por el Gobierno en el 5% para el déficit público en 2022 es “poco exigente” en comparación con el 4,2% que prevé la propia autoridad independiente, al tiempo que advirtió que el gran déficit estructural y el alto endeudamiento sitúan a España en una situación de vulnerabilidad.
Así lo indicó la presidenta de la Airef, Cristina Herrero, durante la presentación del informe de la autoridad independiente sobre la Actualización del Programa de Estabilidad (APE) 2022-2025, en la que apuntó que el escenario macroeconómico manejado por el Gobierno, con una previsión de crecimiento del 4,3% en 2022, es “factible”. Sin embargo, advirtió que “el entorno es de elevada incertidumbre y los riesgos son más elevados de lo habitual”, debido a elementos como la guerra en Ucrania, la alta inflación o la persistencia de la pandemia.
Asimismo, Airef considera que el Programa de Estabilidad actualizado por el Gobierno “plantea escenarios factibles tanto en la vertiente macroeconómica como fiscal”, pero advierte “vulnerabilidades” debido a que el déficit estructural se situará en torno al 4% en 2025 -seis décimas por encima del nivel previo a la pandemia-, por lo que, de no reducirse, hará que la deuda pública inicie una senda ascendente.
Déficit
En lo que respecta a la senda fiscal, Airef considera que la contemplada en la Actualización del Programa de Estabilidad es “factible”, pero con diferencias respecto a la manejada por la propia autoridad independiente en lo relativo al perfil temporal y el reparto entre subsectores, ya que Airef prevé que el déficit cierre 2022 en el 4,2%, frente al 5% que estima el Gobierno, para bajar al 3,3% en 2023 (3,9% estimado por el Ejecutivo), 3% en 2024 (el Gobierno lo sitúa en el 3,3%) y también 3% en 2025 (una décima superior al 2,9% calculado por el Ejecutivo).
A este respecto, Herrero apuntó que la tasa de referencia de déficit para 2022, con un dato global del 5% del PIB para el conjunto de las administraciones públicas, es “poco exigente”, debido a que el déficit público cerró 2021 en el 6,9%, mejorando en 1,5 puntos la tasa de referencia del pasado ejercicio, pero, sin embargo, este mejor comportamiento no ha llevado al Gobierno a marcar una tasa de referencia más baja, sino que la ha mantenido en el 5%.
Por subsectores, Airef espera que, como la administración central asumió la mayor parte del incremento del déficit durante la crisis del covid-19, también concentre su reducción, de manera que para 2022 prevé un déficit del 3,2% para la administración central, frente al 3,8% previsto por el Gobierno, mientras que coincide en calcular un déficit del 0,5% para la Seguridad Social, mejora en una décima su previsión para las comunidades autónomas (0,7% de la Airef, frente a 0,8% del Gobierno) y calcula una décima más de superávit para las corporaciones locales (0,2%, por un 0,1% que calcula el Ejecutivo).
Airef prevé que el peso de los recursos sobre el PIB, sin incluir el Plan de Recuperación, se sitúe en el 41,3% en 2025, en línea con la senda de la APE, mientras que los gastos también reducirán su peso en el escenario central de la Airef, hasta el 44,3% del PIB en 2025, en línea con lo recogido en la APE.
Así, las simulaciones realizadas por la Airef muestran que alcanzar unas cuentas públicas en equilibrio en la próxima década requerirá un ajuste fiscal estructural mantenido de entre 0,25 y 0,5 puntos al año, de manera que un ajuste anual de 0,35 puntos permitiría reducir la ratio de deuda hasta el 80% en 2040, alcanzando el equilibrio presupuestario en 2035 y manteniendo un gasto en intereses contenido en torno al 2,5% del PIB.
A este respecto, la Airef apuntó que “el margen para reducir el déficit presupuestario sin medidas adicionales se agota, estabilizándose en el 3% en 2024 y 2025, el límite fijado por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento” de la UE, y que, al final del periodo de proyección, el déficit estructural de la economía española ascenderá al 4% del PIB, muy alejado del nuevo objetivo de medio plazo fijado por el Gobierno en el 0,4%.
Deuda
En lo que se refiere a la deuda pública, para los próximos cuatro años Airef proyecta una disminución de 9,6 puntos, que la situaría en el 108,8% del PIB en 2025, en línea con la reducción de 8,7 puntos presentada por el Gobierna en el Programa de Estabilidad, que considera “factible”.
Sin embargo, Airef considera que la reducción de la ratio de deuda vendrá sustentada principalmente por el crecimiento del PIB nominal, mientras que el déficit público seguirá contribuyendo “de manera significativa al incremento de la deuda, con una carga financiera que irá aumentando en términos absolutos, pero que permanecerá estable en relación con el PIB por su incremento nominal”. De esta manera, el aumento de los tipos de interés de la deuda supondrá una carga financiera 20.000 millones de euros superior a la prevista en el anterior informe sobre el Programa de Estabilidad.
Así, para la Airef “el estancamiento en la reducción del déficit supone un freno en la disminución de la ratio de deuda, que en 2025 todavía se situará en el 108,8% del PIB”, mientras que, “a partir de ese momento, si el déficit primario estructural se mantiene constante entre el 1,5% y el 2,5%, la deuda iniciará una senda ascendente que la llevaría al 140% en 2040”.