La Fundación Madrina "arropa" a los niños ucranianos
- Ha puesto en marcha la campaña "Niños sin frío", con la que ha hecho entrega de abrigos y zapatos nuevos, además de alimentos a más de 200 niños y sus familias, muchas de ellas de Ucrania
- En el comienzo de la guerra, cerca de 1.800 familias españolas de acogida y pueblos de la España vaciada acogieron a madres con sus niños procedentes de Ucrania
La Fundación Madrina, ha puesto en marcha hoy la campaña "Niños sin frío", con la que ha hecho entrega de abrigos (entran colas) y zapatos nuevos, además de alimentos a más de 200 niños y sus familias de diferentes nacionalidades.
Muchos son de Ucrania, y justo hoy que se cumple un año del inicio de la guerra para ellos está siendo un día especialmente duro, aunque se muestran agradecidos al pueblo español por la solidaridad.
Durante 2022, Fundación Madrina mandó material humanitario a Ucrania, especialmente material sanitario, ropa térmica, medicinas, alimentación e higiene infantil, y cinco generadores para grandes hospitales. Actualmente se está preparando un envío de ambulancias, coches de bomberos y grandes generadores, demandado por hospitales devastados por la guerra.
Fundación Madrina reparte material escolar entre las familias más vulnerables
Banco del Bebé
Sobre el apoyo prestado en España, detallan que más de 200 niños y sus familias se benefician de la alimentación del 'Banco del Bebé'; además, se ofrece ayuda a los adultos en el proceso de desarrollo de curriculum y empleo, alojamiento, regularización legal, sanitaria y educativa. Mientras, el servicio de atención socio-sanitario 'SOSUkraine 24h' ha recibido más de 4.000 llamadas de refugiados y personas en zonas de conflicto como sótanos y túneles con la finalidad de ser rescatadas.
Según Fundación Madrina, en el comienzo de la guerra, cerca de 1.800 familias españolas de acogida y pueblos de la España vaciada acogieron a madres con sus niños procedentes de Ucrania. Este es el caso de Yevheniia Zvireieva, una mujer ucraniana con tres hijos que fue acogida los cuatro primeros meses por una familia española, hasta que vino su marido y su hermano un tiempo después.
