Una explosión pudo causar el siniestro por el que el edificio de Carabanchel se vino abajo en la tarde-noche de ayer causando un herido grave. La Policía Municipal inspecciona este viernes la nave industrial que colapsó, y la investigación ha dado un giro: sospechan que el origen del derrumbe es una deflagración. La estructura de los edificios colindantes no ha resultado dañada, según los bomberos.
La investigación está aún en fase inicial pero los testimonios de los vecinos apuntan a una fuerte deflagración como motivo del derrumbe de la nave ,que albergaba un taller del metal y que se saldó con un trabajador herido grave y otro leve. "Creímos que era una bomba, temblaban las paredes. El techo del taller se elevó y cayó", asegura Jesús, un vecino cuya vivienda está pegada a lo que es ahora casi un solar.
"Olía mucho a gas", afirma. Por fortuna, las estructuras de los edificios colindantes no se han visto afectadas, salvo algunos desperfectos, según los bomberos.
La Policía Científica de Policía Municipal de Madrid lleva a cabo la investigación del suceso. Sólo el 30% de la edificación continúa en pie, el resto son cascotes y escombros.