Una concentración de funcionarios de prisiones ante el Departamento de Justicia en Barcelona ha derivado en cargas y empujones por parte de agentes de los Mossos d'Esquadra para impedir que entraran en la sede de la Consejería, en protesta por el asesinato ayer de una cocinera por parte de un recluso.
Más de un centenar de funcionarios de prisiones se han concentrado ante la sede de la Consejería de Justicia, en la Zona Franca de Barcelona, en una protesta unitaria convocada por los sindicatos UGT, CCOO, CSIF, Intersindical, Acaip y ICA-CATAC tras el asesinato de la cocinera de la cárcel Mas d'Enric de Tarragona.
Los concentrados se han agolpado a las puertas del Departamento y han tratado de irrumpir en el edificio a través de las puertas giratorias de la entrada, lo que ha obligado a los Mossos d'Esquadra a desplegarse para impedírselo.
Los agentes han cargado entonces contra los manifestantes para ganar un perímetro de seguridad frente a la puerta de entrada al edificio, entre empujones y algún forcejeo con los concentrados, que gritan consignas como "asesinos" o "consellera asesina", además de insultos a los policías.
Los concentrados, además, se han untado las palmas de la mano con pintura roja y las han estampado en la fachada de cristal de la Consejería, contra la que también han estrellado huevos.
El objetivo de la movilización es exigir la dimisión de la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, y del director de Servicios Penitenciarios, Amand Calderó, y exigir medidas para garantizar la seguridad del personal penitenciario, después del asesinato de una cocinera de Mas d'Enric por parte de un interno que posteriormente se suicidó.