La Comunidad de Madrid incorpora los testimonios directos de víctimas del terrorismo en la formación en valores democráticos en aquellas personas que cumplen medidas judiciales en los centros de la Agencia regional para la Reeducación y Reinserción del Menor Infractor (ARRMI), ha informado el Gobierno regional en un comunicado.
El consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Enrique López, ha inaugurado hoy en uno de estos complejos, El Lavadero, la cuarta edición de Educando en Libertad, los talleres de sensibilización sobre esta negra etapa de la historia reciente de España que la Agencia organiza desde 2019 en colaboración con la Fundación Miguel Angel Blanco.
El acto ha contado con la intervención de la presidenta de la entidad y hermana del concejal secuestrado y asesinado por ETA hace 25 años, Mari Mar Blanco, así como de su directora, Cristina Cuesta. Esta última, tras relatar su experiencia como fue asesinado su padre Enrique Cuesta en 1982 ha entablado una charla-coloquio con un grupo de menores y jóvenes infractores.
López ha subrayado el hecho de que "muchos jóvenes no saben quién fue Miguel Angel Blanco ni cómo le mataron y tienen poco o nulo conocimiento del terrorismo sufrido en España durante décadas. Por eso, iniciativas como éstas son tan necesarias".
Además, ha asegurado que la Comunidad de Madrid "no va a resignarse en la defensa de quienes, habiendo sufrido el peor daño y la peor violencia, merecen todo el recuerdo, la máxima justicia y la mayor dignidad". La repetición de esta iniciativa llega tras el gran éxito de acogida que tuvieron las ediciones de 2019, 2020 y 2021.
El año pasado, esta actividad se incorporó al convenio de colaboración firmado entre el Ejecutivo autonómico y la Fundación Miguel Angel Blanco, con el objetivo de difundir entre las nuevas generaciones los principios y valores democráticos, así como la promoción y defensa de los Derechos Humanos y la memoria de las víctimas del terrorismo.