El aumento de los rebrotes desde julio y las restricciones al turismo extranjero hacen que la economía española empeore su evolución.
El Banco de España calcula que este año la economía caerá entre un 10,5% y un 12,6%. Es más de lo previsto por el organismo en junio. Además, prevé que en 2021 el PIB rebotará entre un 7,3% y un 4,1%, es menos de la mitad de lo que estimó hace tan solo unos meses.
En ningún escenario se prevé que se recuperen los niveles de crecimiento previos a la crisis en el horizonte hasta 2022, ya que a finales de ese año el PIB se situaría dos puntos por debajo en el escenario más optimista y seis puntos por debajo en el más pesimista, ha apuntado.
El gobernador del Banco de España, Hernández de Cos, ha explicado que la recuperación está siendo "incompleta" porque la industria se ha recuperado pero el sector servicios no y la tasa de ahorro es "muy elevada", así como "heterogénea" en unción de los sectores y "frágil" al producirse rebrotes que obligan a tomar medidas de contención, además de estar "llena de incertidumbre" respecto a posibles confinamientos y la vacuna, que el organismo estima que podría llegar en la segunda mitad de 2021.
El paro además se disparará el año que viene entre un 19,4% y el 22,1% cuando se retiren los ERTE, por eso el gobernador del Banco de España pide que se mantengan.
Pablo Hernández de Cos, considera que "no hay que ser temeroso" a mantener los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por un periodo de tiempo "prolongado", y abogó por focalizarlos de manera "casi empresarial" y no solamente por sectores.
Por su parte, el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, asegura que tiene "dudas muy serias" sobre los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones referentes al coste de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y dijo que, si la cifra fuera "muy inferior al dato que se está dando públicamente, podríamos empezar a hablar de otros temas".