Las altas temperaturas también nos pueden pasar factura al bolsillo.
Media España se lanza al aire acondicionado y al ventilador, y eso repercute en un nuevo subidón del consumo de electricidad.
Según un estudio, con una ola de calor podemos llegar a consumir un 40% más de energía y eso, claro, no sale gratis. La factura puede dispararse hasta en 100 euros más.
La temperatura ideal del hogar se encuentra entre los 24 y 26 grados.
No tener las puertas y ventanas convenientemente selladas produce un 20% de pérdidas de las necesidades de climatización.
El mayor consumo viene provocado por el aire acondicionado que puede llegar a consumir 2.200 frigorías y una media aproximada de 1.350 vatios.