Hay 4 variedades de rosquillas: las listas, las tontas, las francesas y las de Santa Clara. Las pastelerías artesanas de Madrid van a vender en estas fechas seis millones de rosquillas de San Isidro. Será un San Isidro agri-dulce por las circunstancias de la pandemia, pero al menos nos quedamos con el sabor dulce de las rosquillas más famosas de Madrid.
En las mantequerías más antiguas de Madrid y en todo tipo de pastelerías estos días se venden como rosquillas nunca mejor dicho y cada madrileño tiene su favorita y sabe distinguirlas.
Ricardo González, maestro pastelero prepara las rosquillas de San Isidro con la ilusión de quien ha recibido el premio de los Pasteleros de Madrid a las mejores rosquillas de Santa Clara, explica a Telemadrid desde su obrador cómo se preparan.
De tontas a listas
Todas se elaboran con azúcar, harina, huevos aceite… Sólo hay pequeñas diferencias: “las francesas son igual que las tontas, solo llevan anís en grano dentro de la masa y con almendra por encima. Las listas van emborrachadas con un jarabe de limón y las de Santa Clara que van con merengue que se seca en el horno”, dice González.
David Lazcano, de las Pastelerías Adolfo Lazcano dice que “quizá la gente prefiere el mordisco de la lista que es más suave, menos duro que el de las demás, pero todas tienen su público”. Lo cierto es que las hay para todos los gustos.
