París vive este viernes una jornada de caos circulatorio. Cientos de miles de personas se han visto afectadas por un paro masivo del transporte urbano contra la reforma de las pensiones.
Y no es la única protesta que se va a producir, médicos y pilotos se sumarán a la huelga la próxima semana para frenar la propuesta del presidente francés, que entre otras, retrasaría la edad de jubilación.
El colapso ha sido tal que muchas personas han optado por ir caminando, en bicicleta o en patinetes eléctricos a sus destinos. 285 km de carretera estaban abnegados en París.
En cuanto al transporte público, todas las líneas de metro se encontraban cerradas a excepción de 4 que solo funcionaban en horas puntas, solamente dos trenes ofrecían servicio y tan solo un tercio de los autobuses y tranvías estaban circulando.