El presidente del Parlament de Cataluña, Roger Torrent, ha manifestado este lunes durante su declaración como testigo en el juicio del 'procés' en el Tribunal Supremo que está convencido de que el conflicto político en Cataluña "sólo se solucionará mediante un referéndum" y que en este convencimiento se volverá a votar.
"No vamos a renunciar nunca a la voluntad mayoritaria en Cataluña, de los catalanes y catalanas, a decidir nuestro futuro", ha manifestado Torrent, tras ser inquirido por la acusación popular, ejercida por Vox, sobre si las leyes de desconexión suponían crear una legislación paralela a la vigente. Repreguntado por si la finalidad de dichas normas era declarar la independencia en Cataluña, ha insistido: "Su finalidad era que los catalanes pudieran votar y decidir su futuro".
El presidente del Parlament, que ha prometido decir verdad, ha denunciado seguidamente que once del total de doce acusados que se sientan en el banquillo han sido diputados de la Cámara, lo que a su juicio supone una "grave distorsión". También ha expresado su preocupación por el hecho de que todos ellos estén siendo juzgados mientras la extrema derecha --en alusión a Vox-- ejerza la acusación en este procedimiento. Torrent ha defendido que no hay razones para que el presidente o presidenta del Parlament pueda inadmitir una iniciativa parlamentaria porque, a su juicio, no se puede utilizar una prerrogativa de carácter organizativo como es el orden del día de un Pleno "para decir de qué se habla o de lo que no se habla en un Parlamento".
Inquirido por el abogado de Vox Javier Ortega Smith sobre el hecho de que los letrados de la cámara advirtieran de la posible inconstitucionalidad de algunas propuestas --como ocurrió con la ley de referéndum y la de transitoriedad--, Torrent se ha limitado a señalar que los informes de los letrados "no son vinculantes". "La Mesa es un órgano político y no entra nunca a valorar el fondo de las propuestas por muy inconstitucionales que le puedan parecer; sólo mira si han entrado en fondo y forma", ha subrayado, para añadir después que la expresidenta del Parlament Carme Forcadell "no podía hacer otra cosa que no fuera admitir a trámite" las iniciativas del plan independentista.
En otro momento, y a una pregunta de la abogada del Estado, Rosa María Seoane, Torrent ha explicado que las leyes aprobadas el 6 y 7 de septiembre en el Parlament buscaban "una solución política al conflicto, presentar un escenario de diálogo", y que por ello apelaban al diálogo con el Estado. "Buscaban una seguridad para el conjunto de la ciudadanía e instituciones, un proceso de negociación y diálogo con el Gobierno del Estado --ha añadido--. La ley de transitoriedad nunca tuvo efectos jurídicos".
Llegado el turno de las defensas, la declaración de Torrent ha estado marcada por una tensa discusión entre el presidente del tribunal y los abogados de algunos acusados, ya que querían preguntar al testigo por lo que vio el día del referéndum independentista del 1 de octubre y la concentración ante la Consejería de Economía de la Generalitat el 20 de septiembre. Marchena ha interrumpido las preguntas a ese respecto advirtiendo de que ese no era el motivo por el que había sido citado. "No vamos a admitir preguntas que rompan el principio de contradicción", ha insistido Marchena.
Concretamente, ha sido el abogado de Oriol Junqueras y Raul Romeva, Andreu Van Den Eynde, quien ha preguntado a Torrent qué vio durante la jornada del referéndum ilegal. Cuando el político de ERC empezaba a relatar que pudo comprobar cómo "la Policía" estaba "cargando" contra civiles ha sido cortado por Marchena, quien ha advertido de que si les permitiera interrogar sobre este asunto se incumpliría el "principio de contradicción", ya que las acusaciones no habían hecho ninguna mención a este asunto.