La economía es una de las principales preocupaciones para el año que comienza. El 2020 llega cargado de retos como los que provocará la desaceleración económica mundial. La ralentización global podría desembocar en recesión a finales de año.
España debería actual, al menos, en dos frentes, reducir la deuda pública, como advierte Bruselas, e intentar mantener el ritmo de creación de empleo en torno a los 400 mil puestos de trabajo anuales.
De materializarse un Ejecutivo nuevo y unos nuevos presupuestos, tendremos que lidiar con una, más que probable subida de impuestos.