El sector ganadero y avícola está muy preocupado por la revisión de la normativa de bienestar animal propuesta por la UE. Advierten que disparará el precio de los alimentos y que cerrará granjas, sólo en el sector avícola las inversiones superarían los 1500 millones.
Una ley que provoca incertidumbre en el sector ante nuevas exigencias, como el fin de la producción en jaulas para la carne de conejo sin una alternativa viable.
Desde el sector avícola dicen que la ley traerá un desplome de la capacidad productiva por exigencias como la reducción de un 72% del censo de animales en las granjas lo que advierten, triplicaría el precio de la carne de pollo.
Asimismo, los ganaderos advierten que la nueva norma comunitaria traerá consecuencias ya que se - dicen- necesitarán inversiones millonarias para no reducir la producción a la mitad. Ello implicará además disponer de menos ingresos que, aseguran, empujaría al cierre a muchas exploraciones incapaces de hacer frente a las inversiones millonarias requeridas.
Alzan la voz, dicen, para que la carne no se convierta en un artículo de lujo al alcance de muy pocos"
