En el País Vasco, la Ertzaintza investiga el hallazgo de varias bolsas llenas de carne de delfín en el puerto vizcaíno de Bermeo. Su pesca está prohibida, por lo que podría tratarse de un delito contra la fauna protegida.
Los restos de los animales se han encontrado envueltos en bolsas de plástico, bien troceados y listos para ser cocinados y consumidos. La carne, un total de 20 kilográmos, ha sido requisada por la Ertzaintza, cuando fue hallada oculta en un pequeño pesquero.
Hace tiempo que las autoridades estaban vigilando lo que sucedía en la zona, y los pescadores se percataron, por lo que arrojaron el botín al mar. Gracias a los buzos de la policía, ha sido recuperado.
Por los hechos, los pescadores pueden enfrentarse hasta a seis infracciones, cinco de ellas graves, con multas que asciendes hasta más de 60.000 euros.