En la sierra de Guadarrama, la presa del Gasco nos recuerda que hubo un tiempo en el que Madrid soñó con llegar al mar a través de canales navegables.
Iba a ser la presa más alta del mundo pero solamente se canalizaron 25 kilómetros. Más de 200 años después, es un bien de interés cultural.
La presa inacabada del Gasco fue un sueño inacabado de la Ilustración, unir Madrid con el Atlántico y con América.
Fue la mayor obra de ingeniería civil del siglo XVIII. "Más de 2.000 trabajadores como presos o jornaleros". Proyecto megalómano que se convirtió en maldito por la muerte prematura de su ingeniero y las grietas.
El Gasco sirve ahora para caminar, lo hemos hecho con su mayor experto, autor de un libro ilustrado para conocer este sueño truncado que acercaba Madrid al mar.