El presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha advertido este domingo del peligro de "la polarización" de la sociedad, de ahí que el PSOE abogue por la España de la solidaridad, el progreso y la moderación, y que da la espalda al "enfrentamiento y la crispación" que propone la derecha.
"La España que ellos quieren -en alusión a la derecha- es la España en la que solo caben ellos", ha añadido Sánchez en Mérida, donde ha clausurado una convención política de los socialistas extremeños, junto al líder regional, Guillermo Fernández Vara.
Ha expuesto que la denominada "foto de la plaza de Colón" representa "la involución", y este país -ha dicho- necesita mirar al futuro y "no regresar a la España de hace 40 años".
Este retroceso, ha añadido, necesita la respuesta de una movilización masiva en las urnas del 28 de abril, pues de lo contrario "la abstención puede dar el triunfo al extremismo y a los posicionamientos más ultras".
"Es importante apelar a la España progresista, moderada, sensata, cabal, que quiere progresar y no retroceder" frente a "esa amenaza real" de la ultraderecha, tal como ha ocurrido en otros países.
Tal aseverar que el pasado "no puede ser el futuro", el líder del PSOE ha explicado que, como consecuencia del "cambio de época" que vive el país derivado de parámetros como el cambio climático, la digitalización y la precariedad, entre otros, mucha gente puede pensar que "cualquier pasado fue mejor".
Por ello, ha apelado a los valores colectivos, a los principios de igualdad, fraternidad y libertad, y "el saber que el progreso es cosa de todos y no de unos pocos".
Bajo este mismo prisma, Sánchez ha manifestado que, si bien todos los partidos políticos quieren el progreso económico, "la derecha la quiere para unos pocos a costa de todos; para la izquierda, o todos o nadie".
"Que el 28 de abril gane el sentido común", ha abogado Sánchez, quien ha sido crítico con PP y Cs por haberse "mirado el ombligo" y "anteponer sus intereses partidistas" al bien común de la sociedad.
Asimismo, ha advertido a Ciudadanos que la cuerda con la que se han apresurado a poner un "cordón sanitario" al PSOE ante posibles pactos postelectorales lo que en realidad hace es "atarles a la ultraderecha".
Sin referirse de manera expresa al partido de Albert Rivera, ha insistido en avisarle de que no hay cordón sanitario que vaya a parar la movilización de la izquierda contra la vuelta al pasado que quiere la derecha.