Visitamos la Unidad Canina de la Policía Municipal. Koka es una pastor alemán de 3 meses. Está en pleno proceso de educación.
Es la debilidad de todos los agentes de la Unidad Canina. En breve, las maletas será parte de su proceso de entrenamiento.
Hoy toca seguir socializando, en pleno centro de Madrid. Allí es donde muy pronto ejercerá su trabajo. Les cuesta adaptarse a pasar por rejillas. Al ruido también hay que acostumbrarse.
En unos meses se decidirá si trabaja en detectar explosivos, drogas, billetes falsos o se dedica al rescate.
"Los primeros meses son claves en la instrucción para identificar el tipo de aprendizaje".
El objetivo que llegue a ser tan obediente y efectiva como Xena. Son parte fundamental para detectar, en todo tipo de circunstancias, con su olfato lo que es imposible para el resto.