Después de un año de investigación, el crimen de la viuda del ex presidente de la CAM, sigue tan oscuro como al principio. El yerno, que fue el único detenido, está tranquilo y cree que el asunto se va a archivar en breve. Doce meses después de que se produjera este crimen, no se ha encontrado el arma homicida. A pesar de que la policía encuentra indicios contra el yerno, no hay pruebas que demuestren que fue él.
El yerno, único sospechoso, acude a firmar ante el juez cada lunes desde que quedó en libertad. La hermana de la víctima declaró en contra del yerno, a quien sí veía capaz de cometer el crimen. El juez accedió a practicar una prueba de ADN a todas las personas que estuvieron cerca de la víctima, pero los restos biológicos hallados en los casquillos junto al cadáver no se corresponden con los del yerno.
