Sara Peñalver, jugadora de bádminton de Sonseca (Toledo), entrenada por Fernando Rivas, técnico de Carolina Marín, ha logrado el Internacional de Bulgaria y el de Eslovenia, torneos de categoría Future Series, sus primeros torneos internacionales absoluto.
“Carolina es un ejemplo a seguir, entrenar con la mejor del mundo no lo hace cualquiera, es un privilegio que tengo que aprovechar y no lo quiero dejar pasar. Gracias A Carolina se conoce el bádminton”, señala Sara Peñalver.
Sus hermanos, los ‘culpables’
A sus 19 años se encuentra en su primer año en la categoría absoluta. Su paso por el bádminton viene de familia. Su hermano Marco ya lo dejó, mientras que Kike, con 22 años, es ahora el 115 del ranking mundial, segundo español tras Pablo Abián (en la posición 43).
"Yo, como era la más pequeña, y mis padres trabajaban mañana y tarde, no me podía quedar sola en casa mientras mis hermanos entrenaban, así que me tocaba acompañarles. De ir un día y otro y verlos me dio por coger una raquetilla y jugar sola, allí empezó todo", señala.
“El bádminton es un deporte supercompleto, tanto mental como físico, táctico y técnico. Para ser una buena jugadora de bádminton tienes que tener muy fuertes esos aspectos”, concluye Peñalver.